Al lado plantas del cretácico, animales con grandes garras, e insectos de origen desconocidos, y lujo asiático.
Esta casa se encuentra en Indonesia, imbricada en un ambiente natural conectada con el entorno, pero con las comodidades de la vida moderna, tarrazas, piscina, aire acondicionado y muebles cómodos son la fórmula para vivir en esta geografía de calor, humedad y salvajismo aprovechando en dosis cada uno de los aspectos de la vida aventurera sin estresarse.
Incluye home cinema en el jardín, por si se quiere distraer la imaginación, en otros ambientes aunque ya se está en un ambiente que excita la imaginación.
Como si fuera poco, entre otros detalles de lujo, esta casa cuenta con generador propio de energía. Mientras las ciudades sufren problemas de energía, dentro de esta casa se está como en una burbuja, con comodidades que sólo se han visto en el cine.
Esta casa, en Bali, Indonesia, es sin duda uno de los puntos de interés para los arquitectos que busca no imitar la naturaleza, dominarla pero con alianzas.
Indonesia es un damero de islas, con clima tropical y exotismo de marca propia. Es un país que intercepta con todos los sentidos, los colores, los olores y el sabor se encuentran permanentemente estimulados.
En Bali, el atractivo de la playa no termina, pintoresca, ecléctica, ésta ciudad cuenta con una activa vida nocturna.
La casa, invita a quedarse, pero es buena idea darse una vuelta por el resto de las islas, Sumatra, Borneo, Kalimantan, Papúa.
Una estadía exquisita, una caricia para el cuerpo.